SOLIN. LA SALONA ROMANA

Croacia – Split-Dalmacia / SALONA (Dalmatia)
La ciudad de Solin se encuentra situada en la desembocadura del río Jadro, a tan sólo 5 km. al noreste de Split. En sus alrededores se encuentran ubicadas las ruinas de la antigua Salona.
Conquistada durante las guerras romano-ilirias, Salona obtuvo el beneficio de Julio Cesar -procónsul y gobernador de la provincia iliria-, que le dio el rango de colonia denominándola Colonia Martia Julia Salona, en agradecimiento por su apoyo en el conflicto civil que le enfrentó con Pompeyo. Durante la era imperial, Salona se convirtió en el centro de la vida política de Dalmacia, como capital de esta provincia romana, llegando a su cenit con el mandato de Diocleciano, que le concedió el título honorífico de Valeria. El siglo V d.C. vio el ocaso de la villa con la llegada de los hunos y los godos. Revivió bajo el Imperio Romano de Oriente, desapareciendo definitivamente en el 614 d.C. con los avaros y los eslavos.

Las ruinas de Salona todavía no han sido invadidas por los turistas lo que le confiere a la visita un aire romántico. Destaca principalmente el anfiteatro romano, construido en el siglo II d.C. y destruido por los venecianos en el siglo XVII, para evitar que cayera en manos turcas. ¡Podía acomodar en torno a dieciocho mil espectadores!. Al sur del anfiteatro se encontró una necrópolis destinada a los gladiadores muertos en la arena. En ella se hallaron epitafios donde se indicaban sus nombres, lugares de origen, y especialidad luchadora.

Es interesante el Manastirine, enterramiento de los primeros miembros de la comunidad cristiana y sus mártires. Esta necrópolis es el complejo arqueológico mejor preservado de Salona e incluye el Tusculum Museum, creado en 1894 para la primera conferencia de arqueología paleocristiana. Desde entonces, este edificio es el cuartel general de los arqueólogos que trabajan en el yacimiento de Salona.

En Solin encontramos vestigios de una de las puertas de acceso de la antigua Salona romana, la Porta Caesarea. Se encuentra en un buen estado de conservación. Se hallaba flanqueada por dos torres octogonales, pudiéndose observar también los restos de un acueducto. Fue construida a principios del siglo I d.C., durante los últimos años del principado de Augusto.

También se pueden ver restos unas termas públicas, situadas al este de la Basílica, y antiguas iglesias cristianas. Las termas fueron construidas a finales del siglo II d.C. o principios del siglo III d.C. sobre los restos de un anterior edificio privado. Contaban con todas las estancias habituales en este tipo de establecimientos lúdicos: patio abierto, una gran piscina, vestuarios (apodyterium) y las salas de agua caliente (caldarium), templada (tepidarium) y fría (frigidarium).
