Dougga, Patrimonio Mundial de la UNESCO

Publicado el 24 de enero de 2019. Última actualización el 14 de octubre de 2025.
Túnez – Béja / THUGGA (Africa Proconsularis)
El yacimiento arqueológico de Dougga se encuentra en el noroeste de Túnez, cerca de la moderna ciudad de Téboursouk, a unos 100 km de la capital tunecina. Ocupa una superficie de más de 65 hectáreas sobre una colina que domina el valle del Oued Khalled.
Declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO en 1997, Dougga es uno de los conjuntos romanos mejor conservados del norte de África. Su estado de preservación se debe, en gran parte, a que la ciudad antigua nunca fue cubierta por una urbe moderna.
HISTORIA DE THUGGA
El origen de Thugga es númida. Se estableció sobre un oppidum fortificado que formaba parte del reino de Massinissa, aliado de Roma tras la Segunda Guerra Púnica. Se cree que algunos miembros de la familia real númida residieron en esta colina antes de la plena romanización.
En época republicana, tras la caída de Cartago (146 a. C.), el territorio de Dougga pasó a integrarse en la provincia de África, bajo supervisión de Roma. Durante las guerras civiles romanas del siglo I a. C., la ciudad apoyó al bando pompeyano, que acabaría siendo derrotado por Julio César.
La prosperidad urbana llegó en el siglo II d. C., cuando se organizó administrativamente como comunidad mixta: una parte indígena (pagus Thuggensis) y otra romana (civitas Thuggensis).
En tiempos de Caracalla, Dougga alcanzó el rango de municipium, y hacia el año 260 d. C. fue elevada a colonia, bajo el nombre de Colonia Licinia Thugga, probablemente en honor a Gallieno y a la familia Licinia. Durante el siglo III, la ciudad alcanzó su máximo desarrollo urbano y monumental.
Con la desintegración del poder imperial romano, Dougga fue perdiendo relevancia. Permaneció habitada durante el período bizantino, pero con funciones más reducidas. En la Edad Media quedó abandonada, hasta que en el siglo XIX fue redescubierta por exploradores europeos y se convirtió en uno de los primeros sitios excavados sistemáticamente en Túnez.
Hasta mediados del siglo XX, parte de la población local vivía entre las ruinas, siendo trasladada en la década de 1950 para garantizar la conservación del conjunto.
QUÉ VER EN DOUGGA
La antigua Thugga permite recorrer una auténtica ciudad romana del norte de África, con su trazado urbano, edificios públicos, templos, termas y viviendas privadas.
Su extraordinario estado de conservación, nos permite pasear por esta urbe de modo parecido a como lo hacían nuestros ancestros hace casi dos mil años.

EL TEATRO ROMANO DE DOUGGA
Se construyó en el 168 d.C., con capacidad para unos tres mil trescientos espectadores. Una inscripción ubicada en el frons scenae nos relata que P. Marcius Quadratus construyó este teatro, en tiempos del emperador Antonino Pío, en agradecimiento a su designación como flamen. En el restaurado teatro se celebra un festival con representaciones del mundo clásico grecolatino durante los meses de verano. Su construcción es típicamente romana, excavada en una colina aprovechando la orografía del lugar.


EL FORO DE DOUGGA
En el antiguo foro, destaca el templo del Capitolio (1), construido en el siglo II d.C. Estaba dedicado a la tríada capitolina: Júpiter, Juno y Minerva. Según nos acercamos al templo, nos encontramos con cuatro imponentes columnas de estilo corintio que soportan el frontón, donde se halla representada un águila. A buen seguro podemos definir el templo del Capitolio como una de las mejores muestras de la arquitectura religiosa romana en el Norte de África. Restos de la estatua de Júpiter-Saturno hallada en su interior se pueden contemplar en el Museo del Bardo de Túnez.


LAS DOMUS DEL FORO DE DOUGGA
En torno al foro se localiza un barrio residencial que estaría ocupado por las familias más importantes de la ciudad. Entre éstas destacan la “Casa de los pasos”, cuyos mosaicos se encuentran en el Museo del Bardo; la “Casa de Dioniso y Odiseo”, con su maravilloso mosaico de Ulises tentado por las sirenas; o la “Casa del Laberinto” y la “Casa delas tres máscaras”.
Al sureste, se localiza la Casa del Trifolium, prostíbulo de la ciudad y una de las mayores casas de Dougga.


EL TEMPLO DE JUNO
Otro templo que podemos contemplar es el dedicado a la diosa romana Juno Caelestis, que recogió el testigo de la diosa púnica Tanit, esposa de Baal (Saturno). Fue construido en el año 250 d.C., durante “la edad de oro” de la ciudad.


LAS TERMAS DE DOUGGA
Se han identificado cuatro conjuntos termales en Dougga, tres públicos y uno privado. Las Termas Licinias, situadas cerca del foro, datan de época de Caracalla. Otros complejos importantes son las Termas de los Cíclopes, las Termas de Aïn Doura y unas termas privadas junto al templo de Tellus.

Las Termas de los cíclopes (16), denominadas así por ser éste el tema central de un mosaico hallado en las mismas – depositado actualmente en el Museo del Bardo de Túnez-, se encuentran próximas a la Casa del Trifolium. En el lado sur del complejo se encuentran unas amplias letrinas comunales, muestra de que, en el mundo romano, conversación colectiva y necesidades fisiológicas podían ir de la mano.

LOS ARCOS TRIUNFALES
Cerca de las Termas de los Cíclopes se encuentran los restos del arco triunfal (18) levantado en honor a Septimio Severo (193-211 d.C.), primer africano que llegó al trono imperial romano. Otro arco triunfal se levanta también en Dougga en honor del último emperador de la dinastía severa, Severo Alejandro.

VISITAS CERCANAS
El entorno de Dougga ofrece varios enclaves arqueológicos de gran interés que pueden visitarse cómodamente en una jornada. Todos ellos se encuentran dentro de un radio de poco más de una hora por carretera.
EL KEF
A unos 63 kilómetros al oeste (alrededor de 1 hora en coche), El Kef combina restos romanos y bizantinos con una fortaleza otomana que domina el valle. La ciudad conserva vestigios de templos y termas, además de una interesante kasbah del siglo XVII.
BULLA REGIA
A 65 kilómetros al norte (aproximadamente 1 hora de trayecto), Bulla Regia ofrece una visión única de la arquitectura doméstica romana en África. Sus célebres casas subterráneas, diseñadas para soportar el calor del verano, conservan magníficos mosaicos y peristilos parcialmente intactos.
TÉBOURSOUK
A pocos kilómetros del yacimiento, la localidad moderna de Téboursouk sirve como base práctica para la visita. Desde aquí parten las carreteras hacia El Kef y Bulla Regia, y se encuentran servicios y alojamientos locales, además de pequeñas rutas rurales que recorren el valle del Oued Khalled.